En ruta
En ruta... O sea, el cambio del cambio.
(La ilustración llega hasta aquí por el azar del nombre y de San Google. Carlo Ravaioli se llama su autor. Y ahora que la miro despacio, me resulta inquietante, aunque no estoy seguro de que me guste. Se queda.)
7 comentarios:
Pues desde aquí, algo más al norte, un abrazo fuerte. Me gusta que se quede, me gusta mucho.
Claro, hombre. Yo colgué ayer una tontada y conté 40 días hasta el post anterior. La diferencia entre estar o no estar es decirlo.
Tampoco es tanto tiempo, hombre. Me alegro de que se quede.
También a mí me parece inquietante, el cuadro.
Un abrazo.
Interesante..
Las escaleras que se alzan hasta una mínima puerta..
El muro, tan desnudo que vacía el interior..
Nada conduce a nada, todo a todo..
El páramo, cuasi agostado excepto una mancha de verde esperanza..
Los árboles, de perspectiva distorsionada, que se tornan minúsculos hacia el refugio...
Los muros laterales que convierten la casa en un trapecio que se estrecha hacia nosotros y se abre al horizonte..
La soledad de los espacios abiertos y .. ¿por donde se entra al hogar?.
La pincelada larga, horizontal, sin estridencias, ausente de sorpresas..
El cromatismo, oscuro más allá.. y claro en las alturas, tan lejanas..
Interesante..
Ole, ole y ole!!! (aquí debería estar el machanguito verde dando saltos)
Me alegra muchísimo verle de nuevo, don Paolo!!!
Un fuerte abrazo,
Er Opi.
Me alegra verle. Siento no haberle llamado antes de irme de la ciudad pero me tuvieron muy liada. De todos modos tengo que ir de cuando en cuando así que le llamaré, que siempre es un placer verle.
Hola, Opi.
Hola, Gin. ¿Qué tal el retorno?
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